Luego de analizar muestras del sargazo que invadió las playas del Caribe mexicano, la Secretaría de Marina (Semar), afirmó que no contienen concentraciones anormales de contaminantes.
Estos análisis se efectuaron en los laboratorios de los Institutos y Estaciones de Investigación Oceanográfica de la Marina, y forman parte de los estudios para determinar las causas de la proliferación de este tipo de alga.
Los análisis químicos midieron varios factores, entre ellos: temperatura, acidez o pH, oxígeno disuelto, salinidad, sólidos disueltos totales in situ y se recolectaron muestras para determinar bacterias como Enterococos y Coliformes Fecales, así como nutrientes (Nitratos, Nitritos Ortofosfatos y Amonio) y Demanda Bioquímica de Oxígeno.
Sus resultados revelan que el sargazo no contiene arsénico ni metales pesados, el azufre está dentro de las normas nacionales e internacionales y tampoco presenta lixiviados agresivos o dañinos para el medio ambiente terrestre o para los seres humanos.