Desde mayo de 2019, las secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), de Marina (Semar), y 10 dependencias más, presentaron el Programa Integral para la Sustentabilidad en el Alto Golfo de California para preservar a la vaquita marina.
Desde entonces se ha fortalecido la eliminación de la pesca ilegal y se ofrecieron apoyos económicos para el desarrollo de comunidades pesqueras, sin embargo, dichas acciones han resultado insuficientes, por lo que la especie está al borde de la extinción.
De acuerdo con la organización México del Centro para la Diversidad Biológica, “se estima que únicamente quedan entre 6 y 19 ejemplares de vaquita marina”.
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El gobierno federal puso un radio de vigilancia de la especial en el que prohibió todo tipo de pesca, toda vez que la vaquita marina muere ahogada en las redes ilegales colocadas para capturar al pez totoaba, cuyo buche alcanza valores de hasta 100 mil dólares el kilo en el mercado negro de China.
“Si en algo estamos actuando es en ese caso, porque sabemos, digamos, el riesgo que tiene. No se imaginan lo que está haciendo la CONANP en el caso de la vaquita marina y con el caso de totoaba también. Estamos recibiendo reportes todo el tiempo. Está también la Profepa también (…) pero debemos reconocer que una situación muy compleja”, declaró el secretario de Medio Ambiente, Víctor Manuel Toledo, el pasado 12 de diciembre.
El gobierno federal impuso una veda para evitar la pesca en la reserva del alto golfo, y a cambio ofreció subsidios a los pescadores, sin embargo, los habitantes de la Comunidad de San Felipe y otras regiones de Baja California, han denunciado que el apoyo nunca llegó, por lo que varios han vuelto al mar a retomar su actividad productiva.
Apenas la semana pasada, activistas del grupo Sea Shepherd, mostraron fotografías donde se observan decenas de botes pesqueros jalando redes llenas de totoabas cerca del puerto de San Felipe, en México.
“El problema del Alto Golfo de California no nos corresponde nada más a Sermanat, es de muchas dependencias, incluso entra la Secretaría de Relaciones Exteriores porque el tema de la totoaba que se consume en China (…) el gobierno chino tendría que estar participando en esto, porque no es justo que los mexicanos y nuestros impuestos estemos haciendo todo el esfuerzo de conservación y de buen manejo de la pesca mientras que los países que nos están provocando el problema… Entonces ahí va a ser un asunto también de negociación internacional”, puntualizó el titular de la Semarnat.
Los intentos por preservar a la vaquita no quedan solo en la prohibición de la pesca, también se han intentado capturar a dos marsopas para intentar que se reproduzcan en ambientes controlados, sin embargo, hasta el momento solo se ha logrado capturar a una vaquita, y se descubrió que, tras ser apresado, el animal se estresa a tal grado que puede sufrir de un infarto, por lo que el ejemplar fue liberado.
Incluso, un grupo de científicos busca obtener muestras de ADN de las vaquitas mexicanas para unirlas al ADN de dos vaquitas marinas hembra que están congeladas en el Frozen Zoo, ubicado en San Diego, California, para intentar clonar la especie.
